sábado, 9 de abril de 2022

Eu son Exeria. Lectura feminista de un viaje en el siglo IV. Nuevo libro de Marisa Vidal Collazo


Nuestra querida y admirada compañera Marisa Vidal Collazo acaba de publicar un nuevo libro recuperando la genealogía femenina de Exeria y lo ha hecho en gallego, su lengua materna. Recomendamos encarecidamente su lectura y su aportación con él a la teología feminista escrita en gallego. Lo presentamos con sus propias palabras : 


Este es un libro que viene de lejos, de cuando entré a formar parte de la asoc. Mulleres Critiás Galegas Exeria, en 1999, y oí hablar por primera vez de esta mujer. Mi interés por ella fue creciendo y en el año 2012 escribí mis primeros artículos sobre Exeria: un más largo para Encrucillada, revista galega de pensamento cristián y otro más breve, a manera de entrevista, en la revista Irimia, revista de crentes galegas. Con Exeria también participé como ponente en un curso sobre brechas en el patriarcado que las Dones en l’ Esglesia organizaban en la universidad Pompeu Fabra, en Barcelona. Las mulleres cristiás galegas me decían: “tienes que hacer un libro”, pero aquello sonaba a desiderata improbable.

Cuando en Santiago de Compostela se inaugura la casa de las mujeres Xohana Torres, nos vinimos arriba y en aquella fiesta de mujeres soñamos en voz alta que en Compostela hubiera una calle o plaza con el nombre de Exeria. En diciembre de 2020 las Mulleres Cristiás Galegas elevamos al ayuntamiento de Santiago una petición formal, apoyada con las firmas de muchas personas, para que se nombrara como Praza Exeria el nuevo espacio urbano abierto en la entrada del camino framncés en el casco histórico. La nueva plaza tendrá una escultura de bronce, diseñada por Sole Pite, la ilustradora del libro, y ahí nació este libro.

Desde el principio lo pensé como una obra ilustrada por Sole, mi antigua profesora de diseño en el IES Rosalía de Castro con la que seguí teniendo contacto gracias a que ambas colaboramos desde hace más de 20 años en la revista Encrucillada. Para la publicación llamé a un amigo, Antón Vidal, que nos abrió las puertas de la Editorial Galaxia, y así llegamos hoy aquí.

Empecé el libro picada por una frase de la historiadora y ensayista Milagros Rivera Garretas, que escribía que en Exeria todo era tan impecable, tan sencillo y liso que podría parecer que no había nada sospechoso en una mujer que recorre el Imperio romano de una punta a otra a finales del siglo IV. Pero a poco que se mire el contexto, la situación social, política y religiosa de su época es de todo menos impecable, sencilla y lisa. Como no soy una rigurosa investigadora, no me da rubor ninguno leer entre renglones todo lo que Exeria está callando, y contárselo a esta sociedad y esta Iglesia de principios el siglo XXI.

Me llamó la atención a manera de escribir de Exeria, coloquial, sencilla, alejada de las retóricas de moda en su época, estilo que, en lo que pude, intenté imitar. No tengo ninguna duda acerca del elevado nivel cultural de esta mujer, que escribe todo lo que ve, que se desarrolla sin problema en latín (en la escritura) y en griego, que incluso parece saber algo de siríaco. Una mujer que se alegra hondamente cuando le regalan libros, pensando en compartirlos con sus hermanas...

Otro hilo del que tiré fueron las mujeres, las amigas de Exeria, de las que poco sabemos, y las mujeres cristianas de finales del siglo IV, enmarcadas en el ambiente eclesial en el que Exeria se mueve. Hay ya algunos estudios hechos (por hombres) que intentan relacionar, de forma más o menos afortunada, a Exeria con los hombres importantes de su tiempo: Teodosio, Casiano, Prisciliano,... pero no encontré nada que relacione a Exeria con las mujeres. ¿Dónde estaban las mujeres en el siglo IV? ¿Por qué en las investigaciones no se habla de ellas, habida cuenta que Exeria era una mujer y dedica su escrito a un grupo de hermanas y amigas?

Me interesé pues por cómo estaban siendo tratadas las mujeres en la Iglesia cristiana en el siglo IV y también por poner de manifiesto como Exeria, con su viaje, salta por encima de las recomendaciones y prohibiciones de su tiempo. Y lo hace con una pulcritud infinita, sin descomponer ni un momento su discurso, sin un lamento o una queja, como si todo lo que hace sea perfectamente canónico y normalizado.

Y hay aún un tercer hilo en el libro que es la iglesia que Exeria nos revela, tanto a nivel organizativo como humano. La he comparado con los inicios del cristianismo y con la actualidad, y claro... van saliendo hilos y más hilos de los que tirar. Pero para eso estáis vosotras, lectoras y lectores, que seguro podréis seguir recorriendo el camino de Exeria, llevándola más allá del tiempo y del espacio.

Gracias, y buena lectura!

Marisa Vidal Collazo

Mulleres Cristiás Galegas Exeria