jueves, 15 de agosto de 2024

En Primera persona: Experiencias del Círculo de Espiritualidad Yadá 2024: Abrazar la vida en comunidad de mujeres

VENID CONMIGO A UN LUGAR TRANQUILO. Con esta invitación comenzaba para mí una experiencia que ha atravesado mi vida y con la que he descubierto una nueva dimensión en mi ser mujer creyente. La Yadá ha sido UN LUGAR TRANQUILO donde serenar el cuerpo, reconocer y aceptar mis emociones y abrir todos los sentidos a nuevas realidades. Un espacio que ha favorecido un equilibrio entre Palabra y silencio, cuerpo y mente, soledad y grupo. Ha sido UN LUGAR SEGURO donde me he sentido sostenida, acogida, querida, respetada y acompañada. Un lugar de libertad en la expresión tanto del cuerpo como de la palabra. UN LUGAR DE SORORIDAD donde he conocido a mujeres valientes, comprometidas, creyentes aunque también vulnerables y frágiles que nos uníamos entre risas, llantos, abrazos y miradas cómplices llenas de cariño. UN LUGAR donde la Palabra, los rituales, celebraciones están marcadas por la perspectiva de GÉNERO. Cuanto he aprendido, conocido y también cuanto me he emocionado con las VIDAS de otras mujeres. Quiero terminar dando las gracias a quien me invitó: " Ven a La Yadá, que vamos a gozar" y cuanto he gozado. Agradezco enormemente a quienes han preparado animado y sostenido el encuentro. Cuanta vida hay detrás de cada una de las experiencias. Gracias a cada una de las Yaderas, ya sois parte de mi vida. Y por último gracias al Di-s de la Vida que me ha mostrado a través de La Yadá ese sueño de un mundo donde cada persona tenga su lugar. Gracias.


QUÉ ES LA SUERTE? Para muchas personas la suerte es que te toque la lotería, tener un buen trabajo.... Yo hoy os quiero decir que para mí la suerte ha sido que " alguien" me dijera vente a La Yadá que vamos a gozar. Gracias Manoli. Suerte, es encontrarte con un grupo de mujeres que sin conocerme me habéis arropado ,acogido, sostenido física y emocionalmente. Suerte, es poder encontrar un espacio seguro donde expresar con el cuerpo y la palabra. Suerte, es volver a sentirme VIVA, atravesando la dificultad y creyendo como decía Pepa " Di- s no nos ahorra el sufrimiento pero nos sostiene en todo". Gracias por sostenerme y acuerparme. Suerte, es volver a reírme con todas mis ganas, bailar y decir, " buenas noches, hoy ha sido un día grande". Suerte, también es llorar hasta conseguir consuelo acompasando la respiración y la palabra " estoy contigo". Suerte, es también saber que en mi casa me esperan los que han estado siempre. "Estoy aquí". Gracias Di-s por tener tanta suerte. La Yadá no ha pasado por mi vida, la ha atravesado y permanecerá para siempre. Namasté  hermanas, lo mejor de mi para vosotras que pude sentir en el partir y repartir el pan. Cómo dice Rozalen " La ilusión puede volver, distinta pero puede volver" Gracias

Mari Carme