PAN PARA QUE TENER DE QUÉ VIVIR Y ROSAS PARA TENER POR QUÉ VIVIR,
UNA ESPIRITUALISTA FEMINISTA ES SIEMPRE UNA ESPIRITUALIDAD POLÍTICA.
CON DERECHO A LA RISA Y A LA SONRISA,
Una red de mujeres que nos sentimos convocadas por la vivencia de la espiritualidad ignaciana pensada y vivida con perspectiva de género y a la luz de nuevos paradigmas teológicos.