jueves, 21 de diciembre de 2023

jueves, 14 de diciembre de 2023

2ª Escuela de Teología Feminista Popular en San Carlos Borromeo

 Os compartimos el programa de la 2° Escuela de Teología Feminista Popular en san Carlos Borromeo. Será de 19:00 a 20:30 en las fechas indicadas y para la inscripción solo tienes que escribir un mail con tus datos al correo sancarlos@laborromeo.org. ¡No os lo perdáis!



lunes, 4 de diciembre de 2023

Rezar en Adviento con la Revuelta de Mujeres en la Iglesia

 https://www.revueltamujeresenlaiglesia-alcemlaveu.com/para-orar/

Desde la Revuelta de Mujeres en la Iglesia se nos invita a recorrer este Adviento de la mano de varias mujeres bíblicas. Cada semana, una mujer del Antiguo o del Nuevo Testamento, nos acompañará en la oración.

Comenzamos, esta primera semana, con Ana, la profetisa


Seminario Mujeres en Diálogo: La Justicia desde una perspectiva feminista - La aportación de Mary Daly

https://seminariomujeresendialogo.blogspot.com/2023/11/ix-seminario-mujeres-en-dialogo-sesion.html 

Segunda sesión, correspondiente al mes de noviembre, de nuestro seminario "Mujeres en Diálogo" de este curso. Con la teóloga Antonina Wozna

jueves, 2 de noviembre de 2023

Nota de prensa de la Revuelta de mujeres en la iglesia de Madrid sobre el Informe sobre abusos de la iglesia, realizado por el Defensor del pueblo

La Revuelta de mujeres en la Iglesia consideramos que el documento presentado recientemente por el Defensor del Pueblo “Informe sobre los abusos sexuales en el ámbito de la Iglesia católica y el papel de los poderes públicos. Una respuesta necesaria”, ofrece una valiosa oportunidad a toda la Iglesia como Pueblo de Dios, no solo a la jerarquía, para hacernos cargo de esta lacra. Nos comprometemos a estudiar el informe, a reflexionar y dialogar sobre él en nuestros contextos eclesiales y sociales porque los abusos nos incumben a todas y todos en la Iglesia y en la sociedad.

El abuso sexual infantil es un problema prevalente en la sociedad española donde un 11,7% (17% de las mujeres y 6% de los varones) manifiesta haberlo padecido, pero es también un serio problema en el ámbito religioso donde un 1.13% lo ha sufrido a manos de clérigos, religiosos o laicos. A diferencia de lo que ocurre a nivel social, en el ámbito eclesial son mayoritariamente los niños varones las víctimas principales, especialmente durante los años 50, 60 y 70 del siglo pasado.

El informe incluye este estudio cuantitativo que pone en evidencia la magnitud del problema, pero es su aproximación cualitativa la que nos parece de mayor interés ya que recoge los testimonios de más de 400 víctimas que ponen palabras al demoledor impacto de los abusos sexuales en sus vidas, en sus relaciones, en la salud mental y sexual, en los aspectos educativos y profesionales, hasta el muy doloroso daño espiritual tan específico de los abusos en la Iglesia. Los testimonios muestran los factores de riesgo y las dinámicas propias de estos abusos, nos permiten comprenderlos mejor y nos adentran de lleno en el sufrimiento de las víctimas.

Lamentablemente, la falta de respuesta por parte de la institución eclesial, el ocultamiento y la negación que ha prevalecido durante años, ha llevado a las personas abusadas a una dolorosa victimización secundaria o revictimación, con el consiguiente daño a lo largo de toda su vida. Han sufrido una terrible traición de la confianza institucional y espiritual. Deberíamos preguntarnos seriamente como Iglesia qué es lo que ha sucedido para que los abusadores hayan encontrado cobijo y escucha mientras que las víctimas solo han encontrado silencio y rechazo.

Las víctimas claman ser reconocidas, necesitan una petición pública de perdón y ser reparadas íntegramente, también económicamente. Nos parece que un organismo temporal evaluador y un fondo estatal, como propone el informe, en el que la Iglesia entera colaboremos consciente y ampliamente, es una garantía para que esta se lleve a cabo. También la Iglesia entera hemos de arrodillarnos delante de las víctimas.

Creemos que el tránsito desde la negación y el encubrimiento hasta la responsabilización está siendo demasiado lento, resulta insoportable ya para las víctimas, escandaliza a todo el Pueblo de Dios y produce una sangría de fieles y una tremenda desafección por parte de toda la sociedad.

Nos piden también las víctimas un compromiso firme para la no repetición de los abusos. Desde la Revuelta, desde la Iglesia, nos comprometemos a trabajar en la prevención elaborando mapas de riesgo en nuestras instituciones a partir de un mapa de daños, esto es, a partir de la atención a las víctimas reales. Del mismo modo, queremos implicarnos en la construcción de entornos seguros trabajando en la consolidación de relaciones horizontales y simétricas en los ámbitos comunitarios y pastorales con el objetivo de erradicar el clericalismo y acabar con la infantilización y falta de formación de las laicas y laicos. Solo podremos avanzar si trabajamos juntos.

Igualmente es importante no cegarnos en un abordaje que se centre en las “manzanas podridas”, es necesario un cambio de cultura institucional, una mirada sistémica, que incluya la participación de las mujeres en la toma de decisiones, así como una nueva comprensión de la moral sexual y una educación afectivo sexual no represora en los seminarios y casas de formación.

También queremos poner el foco en las víctimas adultas, las mujeres abusad
as, mayoría entre las víctimas actuales y que aún permanecen ocultas porque, como señala también el informe, se les ha dicho demasiadas veces que eran relaciones consentidas entre personas mayores de edad, sin comprender que la profunda asimetría de una relación de acompañamiento espiritual invalida el consentimiento. Es por tanto necesario resignificar el concepto de “adulto vulnerable” para comprender y erradicar los abusos de todo tipo.

El Informe abre un camino y tiende una mano. Muchas gracias al Defensor del Pueblo, a la comisión asesora, a las asociaciones de víctimas y a todas las personas que han participado en su elaboración.

martes, 31 de octubre de 2023

Experiencias: “Baja al taller de la Alfarera”. Mari Carmen García

 Baja al taller de las alfareras, allí te encontrarás con compañeras a las que como a ti, les ha resonado con fuerza la invitación a acompañar y ser acompañadas.

Desde el barro que somos, con humildad, sabiéndonos barro habitado por la Ruáh.

Nos acercamos al taller de las alfareras, la Red Miriam nos invitaba a hacer juntas un camino de dos años, y llegamos, en plena pandemia, con nuestras vasijas asombradas, algunas nuevas, otras ya reparadas, otras ajadas, descolocadas. Con ánimo, valor e incertidumbre, iniciábamos el camino. Cuatro semanas intensivas de formación integral, con sus fases intermedias de trabajo.

1ª Semana: Dios creador, dinámica de crecimiento. 2ª semana; Los dinamismos que nos configura, el Amor, movimiento. 3ª semana; Misterio Pascual, Jesús. 4ª semana; Las relaciones, discernimiento en común.

Cuatro semanas, como cuatro momentos del proceso de elaboración de cerámica hecha del barro: 1. Selección y amasado. 2. Producción y secado. 3. Esmaltado y enfornado. 4. Cocción y enfriado.

En el taller de las alfareras, lo primero es acercarnos al barro de que estamos hechas las personas, conocer algo de nuestra antropología y nuestra psicología. Ese barro animado, vivificado por el Espíritu, Ruáh, barro amado, salvado. Reconociendo al alfarero, la alfarera que nos crea por amor y no abandona nunca la obra de sus manos.

El barro (nuestro cuerpo), incorporado contemplativamente como parte inseparable del proceso.


En un contexto, en un espacio y un tiempo. No es cualquier taller es un taller de alfarería de mujeres y, con y para mujeres, con una mirada y palabras en femenino, feminista.

En clave de discernimiento, es decir, atreviéndonos a dejarnos moldear por la alfarera, cada una con su originalidad; y eso se notaba en la gran riqueza del grupo, lleno de variedades, diversidades, cada una con su forma, su luz, su aporte, su capacidad y originalidad insustituible. Y la Ruáh soplando en el barro y el barro a la escucha, y el barro llegando a ser en su conjunto, una grna obra de arte, una hermosa vajilla, pues cada una y en su conjunto íbamos tomando forma, ganando seguridad en acoger la Vida, acompañando la vida.

Nuestro barro y el barro quienes están cerca, a veces se daña, llega la adversidad y toca afrontarla, gestionarla y consolar; de eso saben mucho las alfareras, acompañar lo que es, lo que hay; recuperar lo que Dios creó, acompañando el amor, las familias.

Y toca practicar, atreverse a equivocarse y aprender de los errores y aciertos, propios y ajenos. Ir acompañando y dejándonos acompañar. Con la vivencia en grupo, avanzando en confianza, en mostrar y acogerlas fragilidades y fortalezas; aprendiendo a reconocer a Dios que se revela de distintas maneras, con una creatividad ilimitada, en este mundo intercultural ancho y ajeno, la vivencia del grupo lo verifica.

Es intenso esto de bajar al taller del alfarero, se acompaña, se es acompañada, se ora, se aprende, se practica en el torno y ahí te das cuenta de que finalmente quien acompaña, quien moldea es la Ruáh y este grupo de mujeres fuertes y tiernas que ha ido estando ahí.

Finalizamos con una semana de silencio como colofón pasar por el corazón, escucha agradecida, momento de posar y reposar lo aprendido y vivido para compartirlo.

GRACIAS Alfareras y compañeras. Volver hacia atrás para ir más allá. Metanoia.


Mari Carmen García

 

miércoles, 20 de septiembre de 2023

VIII SEMINARIO INTERACTIVO MUJERES EN DIÁLOGO


La palabra seminario viene de “seminarius” significa lugar donde brota y se cuidan las semillas. Las organizaciones que convocamos el IX Seminario Mujeres en Diálogo: La Revuelta de mujeres en la Iglesia de Madrid, la Asociación de Teólogas de España, la Red Miriam de espiritualidad ignaciana femenina y la Escuela Universitaria Cardenal Cismeros no nos dedicamos a la jardinería, pero creemos profundamente en lo emergente y optamos por cultivarlo desde el pensamiento y desde la praxis. De ahí nace este seminario, del intento de generar y difundir pensamiento crítico con perspectiva de género en el diálogo fe-ecojusticia.

Nuestra propuesta es una invitación a pensar colectivamente como mujeres “lo nuevo”, lo alternativo. Adentrarnos en nuevos paradigmas que nos ayuden a entender mejor los desafíos de los tiempos nuevos que atravesamos y a comprometernos con ellos. Entendemos que esto es imposible sino es desde una perspectiva feminista y ese es el enfoque que atraviesa todo el seminario, aunque desde su origen siempre han participado en él no solo mujeres, sino también hombres interesados en ello.

El Seminario nace en el año 2016, en modalidad presencial el seno del Institutos Superior de Pastoral, pero tras la pandemia pasa a realizarse en modalidad on line, vinculándose a la Escuela Universitaria Cardenal Cisneros y a las actuales organizaciones convocantes. Al tratarse de un seminario requiere que las participantes preparen las sesiones con unos materiales previos para poder participar en los diálogos. A su vez cada sesión es acompañada por personas expertas en los temas que se abordan.

A lo largo de estos 9 años han participado como expertas filósofas como Olga Belmonte, investigadoras y activistas pacifistas como Carmen Magallón, ecofeministas como Marta Pascual, biblistas como como Carmen Soto, Mariola López, Villanueva, “mujeres sabias” en espiritualidad como Silvia Bara, María José Arana, o historiadoras con Mar Graña, entre otras. Este año contaremos con la presencia de teólogas como Sofia Quispe (desde Bolivia), Antonia Wozna, Mercedes Navarro, Marisa Vidal, la abogada experta en derecho humanos e inmigración Patuca Fernández, la poeta y activista feminista Patricia Olascoaga, la médica Carmen Montejo, de la Comisión de Justicia y Reparación de Revuelta de mujeres en la iglesia de Madrid, la filósofa y activista experta en economía feminista Nieves Salobral, y Cherifa Ben Hassine, presidenta del Centro Cultural Islámico de Valencia.

Como en anteriores convocatorias esperamos contar entre las participantes de este año, con mujeres América Latina y el Caribe y así enriquecernos con diálogos y visiones “trasfronterizas”. Una novedad también de la convocatoria de este curso es la incorporación de una metodología más interactiva que requiere una mayor participación e implicación de las personas que se matriculen, así como de las organizadoras. Quien los desee recibirá la certificación académica correspondiente.

Creemos que este IX Seminario es una propuesta interesante para todas y todos los que como diría María Zambrano queremos pasar el logos por las entrañas y pensar lo nuevo.

Os esperamos. Para más información  
                        pepalavapies@yahoo.es


Pepa Torres Pérez




 

lunes, 11 de septiembre de 2023

Seminario de Acompañamiento. Experiencias

 ACOMPAÑAR Y DEJARSE ACOMPAÑAR EN LO COTIDIANO  

Después de más de 25 años el seminario de Acompañamiento organizado por La Red Mirian de Espiritualidad Ignaciana y el Equipo Ruaj ha sido para muchas mujeres un espacio en el que descubrir el valor y la trascendencia de situarse en la vida en modo cuidado. No solo se puede aprender muchas cosas relativas al acompañamiento sino que la experiencia ayuda a comprender desde el corazón que la escucha activa en los encuentros cotidianos, las preguntas regaladas desde la acogida y la empatía posibilitan nuevos comienzos, una mirada distinta a la realidad y fortalece la certeza profunda en un Dios que sostiene, nos cuida y nos ama en las encrucijadas de nuestros camino, en posibilidades que descubrimos, en la mano tendida, en la fuerza que nos levanta para seguir construyendo vida y esperanza.

El presente que habitamos necesita personas que sepan acompañar y se dejen acompañar porque casi nunca encontramos respuestas solas, necesitamos compañer@s que nos escuchen, nos ayuden a objetivar, nos acompañen un trecho del camino. Porque no somos comunidad solo con desearlo sino aprendiendo a esperar, a sostener preguntas, a tejer sueños con paciencia y fidelidad.

Muchas mujeres han pasado por el seminario a lo largo de los años y ellas son testigos de la verdad de esta propuesta, de la importancia de aprender a ser buenas compañeras de camino. Ellas se han empoderado acompañadas y acompañando, ellas siguen compartiendo caminos de sororidad y profecía y algunas de ellas nos regalan hoy su experiencia. Las escuchamos.

                                                         TAN ESPERADA LUZ

Tras lo que parece casualidad está la mano de Dios desvelando una vez más que toda vida es sagrada y que hay que descalzarse para entrar en ella.

Acoger la vida acompañando la vida, parecen palabras sencillas, pero encierran un significado que tras los dos años de seminario adquieren plenitud de realidad en mí.

Un seminario a través del cual me he ido sumergiendo en lo profundo de mi ser, aprendiendo a surfear y a bucear mi propia vida acogiendo mis miedos, mis imperfecciones, mis temblores, mis limites, mis sombra, mis luces, mis vergüenzas … en definitiva acogiéndome a misma y abrazando lo que soy, dándome el valor de nombrar, aceptar, desvelar, iluminar y atravesar con un amor desmesurado la realidad de vida más auténtica, aquella donde se encuentran los momentos gozosos, los dolorosos, la grietas, los aprendizajes y la heridas.

Y ahí en lo cotidiano de la vida, en cada encuentro, en cada rostro de la comunidad itinerante, de cada mujer, en la escucha de la sabiduría aquellas que ya habían recorrido el camino, en el tiempo pausado, en el entretiempo de los encuentros, en la reflexión, el parar y el silencio me encontré, me reconocí, aprendí a amarme con desmesura, a perdonarme y esa luz que siempre estuvo ahí pero que no podía ver, sentir y dejar ser, se liberó de las cadenas impuestas, las externas y las internas.

Y aprender a acogerme me hizo partera para ser capaz de acoger a otras, y en ese camino aprendí a acompañarnos como compañeras, desde el equilibrio de saber acoger y saber dar, inspirando acogida y expirando acompañamiento.

No puedo más que dar gracias a Dios por ir guiándome hacia este espacio de cuidado, de acogida, de acompañamiento, pero sobre todo de sanación y salvación, agradecida por tanta humanidad preñada de divinidad.

Una experiencia en la que las palabras no me alcanzan para expresar lo vivido y que en una frase resumida sería:

“la vida discernida en comunidad me capacito para ver los hilos de luz que iban unificando las diferentes dimensiones que me configuran, haciéndome una con el mundo y el misterio”
                                                                                                             
                                                                                                                     Estibaliz Durán

                                                    ACOMPAÑADA PARA ACOMPAÑAR 

Acabo de terminar con mucho gusto el XIV seminario de acompañamiento organizado por la Red Miriam y equipo Ruaj. Te comparto 5 razones para lanzarte en esta aventura.

1. Si buscas un espacio para conocerte mejor y crecer de manera integral,

2. Si ves que tu seguimiento a Jesús en su plan de construir un mundo mejor contigo, necesita un paso más.

3. Si como mujer, quieres hacer una lectura creyente de tu fe con gafas de testigas femeninas.

4. Si necesitas acompañar y ser acompañada en la vida diaria con mirada especial a tu realidad.

5. Si quieres aprender a discernir desde la espiritualidad ignaciana femenina.

Este es el momento de hacerte el mejor regalo a ti misma, haciendo camino con muchas otras mujeres que a lo largo de la historia de este seminario han pasado por él. Serás acompañada para acompañar en este arte. Aprenderás y desaprenderás para tu entrega para l@s demás.

El seminario me ha ayudado a vivir conscientemente mi seguimiento a Jesús, a sentirme feliz en mi vocación y misión. He crecido en acompañar con cariño a las personas más vulnerables y mirar mi realidad con ternura. ¿Por qué no tú? ¡Anímate! realmente ¡merece la pena!

                                                                                                        Bibiane Ngoyi Abetu





















jueves, 24 de agosto de 2023

EXPERIENCIAS CIRCULO DE ESPIRITUALIDAD YADA 2023 ( Berriz) : Elena Olartua Gònzalez


GRACIAS!

Lo primero que me sale después de haber vuelto de Bérriz es dar GRACIAS, INFINITAS GRACIAS!. Gracias a la red Miriam por ser precisamente eso, RED que teje y entreteje misteriosamente. Gracias al equipo que con tanto cariño, tiempo, cuidado, trabajo y generosidad ha hecho posible y nos ha regalado una experiencia increíble!.

Cuando me apunté no sabía ni lo que significaba “Yadá” pero me encanta descubrir cómo Dios se las ingenia para regalarte en cada momento justo lo que necesitas, y sobre todo, para sorprenderte y romper tus esquemas. Y a mi me ha sorprendido con una vivencia transformadora y resucitadora de la mano de un grupo de mujeres increíbles, mujeres que han sido Luz, cuidado, alegría para el corazón, inspiración y honda sabiduría, ternura encarnada, resiliencia, silencio que sostiene, sororidad, abrazo sanador, impulso, vida y muchas risas!.

Me ha encantado el enfoque y las propuestas para poder ir haciendo nuestra propia experiencia, con sugerentes textos, oraciones y menús variados (ya les gustaría a muchos restaurantes 3 estrellas Michelín ofrecer tanta calidad!) para elegir lo que en cada momento más te ayudaba a ir haciendo la experiencia. Y me han chiflado las imágenes que nos iluminaban e inspiraban cada día, una preciosidad!.

El primer día nos invitaron a releer la vida a la luz de la Palabra y de la consciencia corporal. Y para mi uno de los mayores regalos de esta experiencia ha sido descubrir el acuerpamiento, cómo mi cuerpo, siente y fluyen por él tantas emociones, algunas a flor de piel, otras enterradas, de la mano del contacto con la naturaleza. Una naturaleza que se nos ha regalado en todo su explendor y que a lo largo de los días se ha ido haciendo una con nuestros cuerpos (aunque tengo que reconocer que cuando el primer día me vi abrazada a una palmera que pinchaba me sentí muy rara pero ahí ya emepzó a surgir una de las palabras de este Yadá: “permanecer”, aún en la incertidumbre, justo ahí).

Otra de las cosas que me ha encantado de esta experiencia ha sido redescubrir Bérriz. Cuando algo te es muy conocido y familiar (Conozco Bérriz y a las Misioneras Mercedarias de Bérriz desde hace más de 25 años) corres el riesgo de creer ingenuamente que ya lo “sabes todo” de ese lugar, y nada más lejos de la realidad!: Nunca me había tumbado en la hierba a contemplar las estrellas a la noche, nunca me había abrazado allí a un árbol, nunca había estado celebrando una cena de mujeres al aire libre, nunca había aullado y bailado como lo hemos hecho en la capilla en la que tantas veces había estado… vamos, un “no parar” de experiencias nuevas. Y precisamente ha sido allí, donde un convento de clausura se transformó en un Instituto Misionero que en 1926 llegó a China en barco, donde he sentido renovado el carisma liberador de la Madre Margarita, “libres para liberar” y la palabra “permanecer”que tanto le gustaba. “Permanecer soltando” sería un buen título para este Yadá.

Acabo que podría estar escribiendo horas… Pero todo lo vivido de la mano de la Ruaj, de la comunidad que hemos formado estos días, y de todas las mujeres que hemos conocido y que han sido todo un Regalazo como Madeleine, Rupi Kaur, Madre Margarita, Exeria, Ruth, Noemí, Etty, beguinas, beatas, Dorothy, Skobtosova, Hadewich … no es algo que se queda en una mera experiencia de verano, un bonito recuerdo, sino que adquiere todo su sentido cuando se convierte en motor y fuerza de Vida, de amor social y político (cómo veíamos uno de los días) para salir al encuentro de tantas personas, tantas mujeres y niñas que viven situaciones de precariedad, explotación, abuso sexual, maltrato, violencia, lesbofobia y transfobia, invisibilidad, soledad y empobrecimiento para encarnar ese amor en lucha, denuncia profética, reivindicación y testimonio, pero siempre juntas.

Me quedo con la frase de nuestro diploma: “Eres una sola persona, pero cuando te mueves, una comunidad entera de mujeres camina contigo” (Rupi Kaur).

Y como las lobas, en manada, auyamos, que otro mundo es posible! “Auuuuuuuuuuuuuuu!!!!”

miércoles, 23 de agosto de 2023

EXPERIENCIAS CIRCULO DE ESPIRITUALIDAD YADA 23 ( Berriz): Laura Gregorio González

 Mi experiencia en Yadá 2023: Laura  Gregorio González 

 

Me hablaron en la Revuelta de mujeres de esta semana de retiro espiritual de mujeres, sin explicarme demasiado, la verdad. Conociendo a quienes me lo recomendaban, sabía que no podría defraudarme, y me apunté, sin saber siquiera qué significaba eso de “Yadá”. Mis hijos me “reñían” diciéndome que cómo me apuntaba a algo que sin saber exactamente qué era, y bromeaban diciéndome que a ver si acababa en el retiro de una secta.

La verdad es que la experiencia no ha podido ser mejor: vuelvo renovada a casa, y con ganas de repetir el año que viene, si puede ser.

Han sido días intensos de aprender, reflexionar y orar, de compartir con otras 21 mujeres la fe, la vida, las heridas de cada una y la forma de cicatrizarlas. Días de aprender nuevos modos de orar, de descubrir qué es acuerpar lo vivido, pasando por nuestro cuerpo las experiencias, oraciones y reflexiones de cada día. Y días para concluir, en fin, que toda nuestra fe tiene al final que ponerse a trabajar por los demás para que tenga sentido.

Hemos disfrutado de unas ponentes excepcionales, que tanto a nivel de conocimientos, como a nivel vivencial, nos han trasmitido muchas inquietudes, mucha vida, dándonos pistas para pensar, orar y para que ahora, a la vuelta a casa, podamos actuar. Y, además, descubriéndonos genealogías de mujeres (poco conocidas para la mayoría de nosotras) que nos ayudan a vivir la fe y trasladarla a la vida, al compromiso con los más necesitados, al “amor hasta el extremo”. Mujeres luchadoras, a veces borradas o poco destacadas en la historia de la Iglesia, poco conocidas a pesar de su grandeza, como tantas … ¡¡Ay, qué necesaria es la Revuelta de mujeres en la Iglesia!!

Además de todo eso, estos días he conocido a muchas mujeres de toda España con las que tejer redes, círculos de sororidad y apoyo, de las que he aprendido lo indecible, con las que me he reído muchísimo, y con las que he disfrutado cada rato.

Días aprovechados al máximo en un lugar privilegiado, en el Convento de las Misioneras Mercedarias de Bérriz (ojo con la Madre Margarita López de Maturana, y todo lo que aprendimos sobre ella en el Museo que hay en el propio Convento, otra mujer luchadora), que es un sitio precioso, en mitad de los campos de Vizcaya.

Decir que ha sido una gran experiencia se me queda corto. Ha sido una vivencia que me ha removido y conmovido, una oportunidad y un privilegio, que creo que he aprovechado bien, aunque la aplicación práctica de lo vivido se tiene que empezar a demostrar ahora, al volver a casa y durante este curso que empezaremos en breve.

Gracias a la Red Miriam por organizarlo, a las horas de trabajo que se han invertido para su preparación, y a lo vivido con todas las que habéis participado y compartido lo que sois, porque os llevo a todas en el corazón, de verdad.


Laura De Gregorio González

miércoles, 26 de julio de 2023

Ritual de agradecimiento "por tanto bien recibido"

https://www.youtube.com/watch?v=95ELgWuTgaY

Aunque han pasado ya algunos meses compartimos el último ritual de agradecimiento con motivo del fin de curso que hicimos en la Red   

sábado, 22 de julio de 2023

Feliz día de María Magdalena


 Por ella fuimos,  por ella y con ella somos  y con tantas otras, de Sur a Norte del planeta , siempre en rebeldía , al filo de lo posible para empujar lo imposible. Hasta que la igualdad sea costumbre  

jueves, 13 de julio de 2023

Preparando el Círculo de Espiritualidad Yada


Está será una de las imágenes que nos acompañará  en el Yada 2023, 
el tercer día en el que abordaremos el  tema 

ACUERPAR EL AMOR, 

CUERPO DE MUJER,

 CUERPO DE LA TIERRA   

¡Que ganas!

domingo, 4 de junio de 2023

Feliz día de la Trinidad


 Di-s es Relacion y Comunión de lo diverso, por eso nada mas opuesto a Él- Ella que los dogmatismos y la intolerancia  

miércoles, 31 de mayo de 2023

Genealogías femeninas y maestras de vida: Simone Weill (Alandar Mayo 2023)


En el contexto electoral la voz de otra gran maestra de vida: Simone Weill, se acerca a mi oído y como guardando un secreto me cuenta su historia y su compromiso político

Nací en Paris el febrero de 1909 en el seno de una familia acomodada judía y en un tiempo oscuro amenazado de totalitarismo y barbarie como así fue. Mi familia estaba convencida que la cultura era un instrumento imprescindible para hacer a los pueblos y a las personas tolerantes y libres y así nos educaron, tanto a mi querido hermano André, como a mí, en el gusto y la pasión por el estudio y la reflexión crítica.

Desde niña la brillantez intelectual de mi hermano fue para mí un estímulo importante y a veces también motivo de desánimo e incluso de desesperación, porque desde muy pequeña me apasiono el conocimiento de la verdad y durante gran parte de mi vida creí que solo podría acceder a ella a través del conocimiento y la reflexión teórica

Mucho más tarde comprendería que es el propio deseo de búsqueda de la verdad lo que nos va conduciendo a encontrar su rastro y que la verdad más que una idea pide ser encarnada. La búsqueda de la verdad y la compasión hicieron de mí una mujer inquieta y crítica hasta el final de mi vida, difícil de clasificar.

De ellas brotó también mi amor por la filosofía, cuya pasión se haría aún mucho más intensa siendo alumna de mi querido profesor y posteriormente siempre amigo Alain (Émile Chartier). ¡Sus enseñanzas me hicieron despertar a tantas utopías y grandes deseos: la justicia social, la libertad democrática, etc, y a olvidarme de todo lo que no sirviera para tal fin, ¡cosas tan básicas como la forma de vestir o incluso comer!.

Mi paso por la Soborna y la Escuela Normal Superior de Paris, con apenas 19 años contribuyó también enormemente a que mi pasión por la filosofía se hiciera más radical y social y políticamente comprometida. La cuestión de la explotación de las masas obreras en el trabajo y el hambre en el mundo se convirtieron para mí en una urgencia ética. Recuerdo una tarde que Simone de Beauvoir y yo coincidimos en una tertulia donde ella planteó que el mayor problema de la humanidad era encontrar sentido a la existencia. Y yo con toda mi pasión juvenil de aquel momento, no pude menos de cuestionar aquella afirmación como propia de alguien que tenía todas las necesidades cubiertas y que la revolución más necesaria para la humanidad no podía ser otra que poner fin al hambre en el mundo.

Mis comentarios, mi agudeza intelectual y mi forma de vestir siempre desaliñada, me hicieron muy conocida en los ambientes intelectuales de la Sorbona, máxime cuando además era la única mujer de mi clase y empecé a participar en grupos de desobediencia civil y a denunciar la política colonialista francesa. En este tiempo mi experiencia de Dios se me fue confirmado inseparable de la praxis ética y la justicia, hasta el punto de como escribí por aquellos años: creer en Dios no es otra cosa que la acción justa.

Trabajé como profesora de filosofía en la escuela de Le Puy y me incorporé activamente al movimiento sindical, sumándome a las reivindicaciones obreras de los trabajadores más explotados y a dar clases gratuitas a los mineros. Algo que, a la dirección de mi centro, presionada por los padres de mis alumnos, les pareció impropio de una profesora de filosofía e hicieron lo posible por destituirme. Viajé a Alemania para conocer más de cerca el movimiento sindical y el marxismo, hasta que en 1943, tras una larga crisis de salud e ideológica, tomé la decisión de abandonar la política partidista por la violencia y el odio que engendraba, pero seguí siendo fiel al compromiso con los humillados y explotados.

Fue entonces cuando tomé la decisión de abandonar la enseñanza de la filosofía para vivir desde dentro la experiencia de pobreza y explotación. Así lo hice trabajando como obrera en la fábrica de electricidad Alsthom donde, como escribiría más tarde, viví la experiencia de que la sociedad moderna se edificada sobre trabajos para los cuales el ser humano debe obligarse a no pensar. La dureza del trabajo y sus consecuencias terribles para la salud: quemaduras, accidentes laborales, problemas de audición, ritmo inhumano que llevan a las personas a deslizarse hacia el estado de bestia de carga dejarán una honda huella en mi espíritu y me llevarán a participar de la desdicha ajena como propia y junto a ella la solidaridad entre iguales.

Después de la fábrica de Alsthom pasé por muchas otras, pero fue en la Renault donde viví las experiencias más duras y humillantes, la brutalidad de otros seres humanos que (…)imponían la crueldad y la opresión. Allí tuve la experiencia como escribí a mi gran amiga Albertine Thévenon, que una opresión inexorable e invencible no engendra como reacción inmediata la rebelión, sino la sumisión. A partir de este momento supe que dedicaría todo lo que me quedara de vida a luchar para que el ser humano pudiera tener oportunidades para vivir de una forma digna y fraterna. Mi salud se debilitó enormemente y en un viaje que hice a Portugal en 1935 para recuperarme, entre pescadores tuve una experiencia religiosa que marcaría para siempre mi existencia como escribí a mi querido amigo el padre Perrin:

Tenía el cuerpo y el alma despedazados, aquel contacto con la desdicha había matado mi juventud (…) Al estar en una fábrica, confundida a los ojos de todos y a los míos propios con la masa anónima, la desdicha de los otros penetró en mi carne y en mi alma (…). Lo que allí sufrí me marcó para siempre (…). Con este estado de ánimo y en unas condiciones físicas miserables, llegué a ese pequeño pueblo portugués, que era igualmente miserable, sola, por la noche, bajo la luna llena, el día de la fiesta patronal (…) Las mujeres de los pescadores caminaban en procesión junto a las barcas; portaban cirios y entonaban cánticos, sin duda muy antiguos, de una tristeza desgarradora (…). Allí tuve de repente la certeza de que el cristianismo es por excelencia la religión de los esclavos, de que los esclavos no podían dejar de adherirse a ella, y yo me sentí entre ellos.

Fue poco después cuando retomé de nuevo la docencia y la escritura filosófica sin dejar nunca de apoyar a los miles de refugiados que llegaban de Alemania acogiéndoles en mi casa y en la de mi familia. El golpe de estado de Franco y la defensa de la república en España fue para muchos de mis contemporáneos y contemporáneas un revulsivo ante el que nos quisimos ser meros espectadores, Marché entones al frente como periodista en la columna Durruti. Allí el horror de la guerra y la decepción de la izquierda me provocaron una intensa crisis de la que saldrían algunos de mis artículos y reflexiones filosóficas más discutidas.

Al volver a Francia me incorporé de nuevo al activismo pacifista contra la política colonial francesa en Indochina. Dos años después en un viaje de descanso a Italia, en Asís, en la capilla de Santa María de los Ángeles. tuve una segunda experiencia de encuentro con Dios que marcará mi vida para siempre y algo más fuerte que yo me obligó por primera vez a ponerme de rodillas. Al año siguiente en Solesmes, tras asistir a los oficios de Semana Santa: me sentí de nuevo visitada por Cristo y amada por Él intensamente:

Sentí una presencia más personal, más cierta, más real que la de un ser humano, inaccesible tanto a los sentidos como a la imaginación, análoga al amor que se transparentaría a través de la más tierna sonrisa de un ser amado. Desde ese instante, el nombre de Dios y el de Cristo se han mezclado de forma cada vez más irresistible en mis pensamientos.

Por aquellos años escribí algunos de mis textos más conocidos: Meditación sobre la obediencia y la libertad y Sobre las condiciones del marxismo. Examen critico de las ideas de revolución y progreso.

Ya entonces el horror de los totalitarismos, y la guerra marcarán mi reflexión y mi vida para siempre. Fue entonces cuando empezó a tomar cuerpo en mi un proyecto que nunca pude realizar, pero que intenté darlo a luz con todas mis fuerzas: un cuerpo de enfermeras en primera línea del frente. El 1 de Junio de 1940 los alemanes entraron en Paris y forzada por mis padres tuve que huir con ellos hacia Marsella. Allí conocí a mis grandes amigos Jean Lambert, Gilbert Khan, Gustave Thivon, Helene Honrat, que a mi muerte publicarán muchos de mis textos inéditos. A través de ellos conocí también al padre Perrin, mi gran confidente espiritual.

En esta ciudad fui detenida varias veces por mi implicación con la Resistencia. En este tiempo el deseo de estar junto a los trabajadores más humildes me llevará a trabajar como temporera en el campo y a experimentar, como escribí por aquel entonces, un agradecimiento s
incero por(…) haberme sacado de la categoría social de los intelectuales y haberme dado la tierra y con ella la naturaleza (…). Será este un tiempo inmensamente creativo, como si intuyera mi muerte próxima

En mayo de 1942 mi familia y yo con cientos de refugiados embarcamos hacia Casablanca y desde allí a Nueva York. Pero yo no dejé en el empeño de regresar a Europa y así lo hice llegando hasta Londres, dispuesta a colaborar más intensamente con la Resisten
cia al nazismo. Sin embargo, mis planes se vieron muy pronto truncados por mi frágil salud.

Mi deseo de solidaridad me llevó a dejar de comer hasta que el pan no llegara a todos, Mi muerte aconteció el 24 de Agosto en 1943 en Ashford, alejada de mi familia y mis amigos, identificada con los últimos y los perdedores de la historia a los que había ido poco a poco entregando toda mi vida : mi pensamiento intelectual, mi frágil cuerpo y la libertad de un corazón siempre anhelante en búsqueda de la verdad y de encarnarla.


Pepa Torres Pèrez

viernes, 14 de abril de 2023

¿Qué es el Circulo de espiritualidad YADA?

Soy Pilar Aisa de Mujeres y Teología de Zaragoza y formo parte de la Red Miriam, soy Partera, miembro del equipo Yada y del de coordinación.Os voy a contar un poquito que es el YADA.

El Círculo de Espiritualidad Yada, es otro proyecto de la Red. Su nombre proviene del hebreo que significa Conocer por experiencia. Una de sus características es la diversidad de las personas que cada año formamos el grupo, diversas en edad, profesión, estilos de vida, lugar de procedencia…pero con una idea común, la búsqueda de unos días de oración, espiritualidad y cuidados, haciendo hueco a la Palabra y dejando que atraviese nuestra corporeidad y nos empape.

Son seis días en que, un grupo de unas 20 mujeres, nos juntamos en Galicia, donde la Naturaleza siempre es un plus, en ese desconectar del trajín y del ruido, para renovar el aire y los deseos de perforar la realidad y trenzar vínculos entre nosotras, como refuerzo positivo para cambiar estilos de vida, que hagan que otro mundo sea posible.

Esta experiencia la vivimos en circularidad, sin jerarquías, en igualdad, partiendo del momento vital de cada una, alternando tiempos de silencio y de escucha, con aplicación de sentidos, como dice Ignacio, para en ese Sentir y Gustar internamente lo que vivimos…tratar de encontrar a Dios en todas las cosas.

Junto a esta pedagogía ignaciana y algunas claves de los Ejercicios Espirituales, nos acompañan genealogías femeninas que nos aportan su mística y su música, en esta danza de la vida. Así como mujeres actuales, activistas, defensoras de DD. HH y del Medio Ambiente, que vienen a ampliar y enriquecer el círculo. La Ruah, siempre fecunda y multiplicadora, deja sentir su presencia en tono de alabanza.

Tenemos espacios celebrativos y otros, donde ponemos en común los sabores y saberes de cada una, con una valoración al alza, de la diversidad. Siempre con perspectiva de género.

Os animamos a que vayáis calentado motores para a próxima convocatoria

 Pilar Aisa 





lunes, 10 de abril de 2023

RESUCITAR LA IGLESIA DESDE LAS MUJERES ( Cristianismo y Justicia. Abril 2023)


 El pasado 5 de marzo en la acción performativa que la Revuelta de mujeres en la iglesia- Alcem la veu celebramos en Madrid, frente a la catedral de la Almudena, para exigir el fin de nuestra discriminación en la iglesia, revivimos la experiencia de aquellas mujeres que en la mañana de Pascua se pusieron en marcha hacia el sepulcro. Mujeres, que aun con el corazón y sus sueños hechos pedazos portaban también seminalmente en su interior la esperanza que la injustica, la desigualdad, y la violencia no podían tener la última palabra en la historia. En aquel éxodo de mujeres aconteció lo inédito. El sepulcro se abrió y en el cuerpo roto de Jesús torturado, Dios-Madre se rasgó para dar a luz una nueva humanidad, una nueva creación, una nueva iglesia.

Al amanecer del primer día de la semana, iban María Magdalena, María la de Santiago, Salomé y la otra María, de camino hacia el sepulcro. Iban pesarosas, compartiendo su profunda tristeza, su desconcierto. Les sobrecogía la incertidumbre, la indignación por todo lo acontecido con Jesús. ¿Cómo había sido capaz de llegar el poder religioso a semejante ignominia¡¡).

Han matado a Jesús de Nazareth, se decían consternadas

Han matado a nuestro Maestro, repetían con perplejidad.

Sin voz, sin palabra, sólo les quedaba el discreto papel que les había dejado el sistema patriarcal y clerical: ungüentar, amortajar, llorar, velar lo yerto, el cuerpo de su amado.

Aun así, no perdieron su perfume, su aroma, su seña de identidad y se pertrecharon con toda clase de especias aromáticas para aplacar el olor a muerto, a podredumbre.

Mientras caminaban hacia el sepulcro se decían unas a otras,

“Ya no cabe esperanza en esta Iglesia; no es posible el cambio.

“No sé” decía otra, todavía esperanzada.

“¿De verdad crees que vamos a poder mover esta pesada losa?, ¿Qué ingenua!”

“¿Quién nos moverá la piedra de esta Iglesia jerárquica y Clerical? Es imposible”

“¿Quién nos moverá la piedra para entrar al sepulcro?”

Somos muchas las mujeres cristianas en el mundo que experimentamos conmocionadas y comprometidas que la violencia y la injusticia con las mujeres al interior y al exterior de la iglesia no pueden tener la última palabra. Aquel que murió de vida, por anunciar el Evangelio como una Buena noticia de liberación para las mujeres nos cubre con su Ruah creativa y resiliente en el compromiso y la exigencia de la ekklesia de Jesús como comunidad de iguales, hasta que las últimas sean las primeras (Mt 19,30-20).

Por eso esta Pascua. habitadas por el espíritu de aquellas primeras portadoras de perfumes renovamos nuestro sueños y compromisos inaplazables como mujeres en la iglesia, sintiendo que se va alumbrando algo nuevo, pero que tenemos que seguir soñando y trabajando insistentemente por ello. La Pascua renueva nuestro convencimiento de que el Resucitado es el Crucificado, encarnado también en las crucificadas de la historia, con ellas nos invita a alumbrar de nuevo la iglesia y la mesa inclusiva de la sororidad. Por eso la pascua es tiempo de renovar sueños y compromisos:

Soñamos y trabajamos por una iglesia que rompa con la antropología patriarcal, que legitima la subalternidad y la discriminación de las mujeres. Frente a ello proponemos una antropología relacional basada en las relaciones de mutualidad. Una antropología que recupera imágenes y lenguajes sobre la divinidad también femeninos, ignorados tradicionalmente en la historia de la iglesia, pero que sin embargo forman parte de la revelación bíblica. Una iglesia que elimine el lenguaje patriarcal y sexista de homilías, textos y documentos y se atreva a interpretarlos, no sólo para leer la Biblia y vivir el evangelio de otro modo, sino para que sean liberadores para la humanidad entera.

Soñamos y trabajamos por una iglesia que reconozca de hecho, que los cuerpos de las mujeres son cuerpos a imagen y semejanza de Dios y por tanto aptos para representar lo divino y nunca objetos de explotación y violencia.

Soñamos y trabajamos por una iglesia que favorezca la cultura del cuidado, el buen trato, y las relaciones horizontales en todos sus espacios. Una iglesia con tolerancia cero con la pederastia y las violencias machistas, dentro y fuera de ella misma. Una iglesia que mire a los ojos a sus víctimas y se ponga de su parte poniendo en marcha mecanismos que hagan posible la justicia, la reparación y la prevención

Soñamos y trabajamos por una Iglesia en la que las mujeres seamos miembros de pleno derecho. Porque en un mundo en el que las mujeres tenemos responsabilidades políticas, sociales, económicas y de gobierno, resulta incomprensible y anacrónico nuestra escasa representación en los principales órganos consultivos, de discernimiento y de decisión de la Iglesia.

Soñamos y trabajamos por con una Iglesia que reconozca la plena ministerialidad de las mujeres. Que no nos niegue ni el don, ni la gracia, ni la vocación, ni el derecho, en virtud de nuestra consagración como bautizadas y en la que desaparezca todo tipo de discriminación por razón de sexo.

Soñamos y trabajamos por una iglesia que se nutra y reeduque desde las aportaciones de la teología feminista, para hacer una lectura crítica y una reflexión de la propia experiencia y del evangelio, convencida que el evangelio no puede ser proclamado si no se tiene en cuenta el discipulado de las mujeres

Soñamos y trabajamos por un iglesia comprometida contra la feminización de la pobreza y de la violencia de género dentro y fuera de ella misma, que respete la libertad y la adultez de mujeres y repiense la moral especialmente la sexual y la económica desde la perspectiva de las mujeres.

Soñamos y trabajamos por una iglesia que se abra al diálogo y la cultura de los movimientos de liberación de las mujeres, subrayando que la igualdad que buscamos no consiste en repetir el modelo masculino ni su comportamiento, sino la igualdad de derechos en una sociedad y en una Iglesia con palabra también de mujer y fundada en relaciones de justicia.

En este camino de sueños y compromisos compartidos sabemos que no estamos solas y que aquellas mujeres de la primera Pascua: La mujer del perfume, María Magdalena, María  de Nazaret, Salomé   Juana, María la de Cleofas  (Lc 24,10; Mt 28,1;Mc 16,1; Jn 20,14-18) nos hacen un guiño cómplice.


Pepa Torres Pèrez



































miércoles, 5 de abril de 2023

Comentario del Evangelio (9 de abril). Alumbrar la iglesia desde las mujeres (Juan 20,1-9)

Alumbrar la iglesia desde las mujeres
(Juan 20,1-9)


En lo relatos de la Resurrección de Jesús el protagonismo de Maria Magdalena y las mujeres es evidente. Sin embargo, su huella fue neutralizándose progresivamente en la historia del cristianismo en aras de la construcción cultural de la subordinación de las mujeres, lo cual “chirriaba” con el papel de liderazgo que tuvieron en el movimiento de Jesús.

Las mujeres que acompañaron a Jesús siguiéndole y sirviéndole con sus bienes, como recoge el texto de lucas 8,1 fueron también aquellas que aparecen acompañándole hasta la cruz (Mc 15,40-41), cuando la mayoría de los discípulos varones le abandonan. Muchas de ellas aparecen de nuevo en las narraciones del entierro, la tumba vacía y las apariciones. 

Su papel como testigos de las prácticas liberadoras de Jesús, incluyendo en sus propias vidas, las capacitó para mirar la realidad más allá de la apariencia y experimentar, como María Magdalena aquella primera mañana de Pascua, que la tortura, la complicidad del poder político y religioso, un juicio injusto y la condena a una muerte maldita como era la crucifixión no podían acabar con tanto amor y esperanza como la vida de Jesús había desplegado.

El Dios Abba, Todo misericordia y cuidado que Jesús les había revelado las empujó, más allá de toda lógica, a ponerse en marcha para ungir aquel cuerpo roto por amor y fidelidad a la Buena Noticia de Dios con los y las más insignificantes y excluidas

El Evangelio de este domingo narra esta experiencia desde el sobresalto de María Magdalena ante la tumba vacía y su anuncio, pero progresivamente va dando el protagonismo no a ella, sino al papel de los varones que lo confirman. 


Del mismo modo la iglesia ha ido reproduciendo y lo sigue haciendo, la invisibilidad y la subalternidad de las mujeres, pese a que es inimaginable hoy en el mundo una iglesia sin el papel activo de las mujeres en ella,

La Pascua de Jesús nos urge a hacerlo todo nuevo y con la ayuda de su Ruah a alumbrar una nueva iglesia construida sobre el cimiento de su cuerpo encarnado y resucitado también en los cuerpos rotos de las mujeres por la pobreza y la violencia patriarcal y donde nadie quede excluido por su condición, de género, clase, sexo, raza.

¿En qué medidas nuestras comunidades somos sensibles a los gritos y los anhelos más profundos de las mujeres que claman liberación, sanación, justicia?

¿Reconocemos hoy entre nosotros y nosotras a las nuevas Magdalenas, Marías, Juanas Salomes? ¿Qué buena noticia y a que cambios nos urgen para resucitar la iglesia?.



Pepa Torres Pérez

jueves, 30 de marzo de 2023

Acuerpando rebeldías y propuestas como red estatal: II Encuentros de representantes Revuelta de mujeres en la iglesia- Alcem la veu


Reunidas en Ciempozuelos los días 24- 26 de Marzo los colectivos de mujeres feministas cristianas que formamos parte de la Revuelta de mujeres en la iglesia y Alcem la Veu:

Alcem la veu Barcelona

Alcem la veu Valencia

Alcem la veu Menorca

Asociación de mulleres Cristiás Galegas Exeria

CWC

Mujeres y Teología de Cantabria

Mujeres y teología de la Rioja en la Revuelta de las mujeres en la iglesia

Mujeres y teología de Cabra (Córdoba)

Revuelta de mujeres en la iglesia de Córdoba

Revuelta de mujeres en la iglesia de Bizakaia- Gure Hitza

Revuelto de Mujeres en la iglesia de Madrid

Revuelta de mujeres en la iglesia de Sevilla

Revuelta de mujeres en la iglesia Vitoria-Gasteiz

Revuelta de mujeres en la Iglesia de San Sebastián- Donostia

Revuelta de mujeres en la iglesia Granada

Revuelta de mujeres en la iglesia Málaga

Revuelta de Mujeres en la iglesia de Alicante

Revuelta de mujeres en la iglesia de Gran canaria

Revuelta de mujeres en la iglesia de Asturias

Mujeres en la Iglesia de Burgos por la igualdad

Conscientes que la Ruah nos está empujando de forma vigorosa y creativa con el surgimiento de nuevos grupos empeñados en resucitar la iglesia desde la perspectiva de las mujeres y al modo de Jesús de Nazaret. Agradecemos la inspiración de este encuentro. Un encuentro lleno de pasión diálogo, creatividad, escucha, y acogida de las diferencias. Ya es mañana de Pascua con Marta y Maria

(Jn 11,3,-717.20-27.33b-45)

 

miércoles, 22 de marzo de 2023

II Encuentro estatal de representantes REVUELTA DE MUJERES EN LA IGLESIA-ALCEM LA VEU


 Este fin de semana del 24-26 de Marzo  acuerparemos aun con más  fuerza nuestra rebeldías y propuestas como red estatal hasta que la igualdad sea costumbre   

Presentación del libro : Mujeres ignacianas. Textos esenciales


 Con gran alegría nuestra Red se suma a la edición de este libro como un obra necesaria para la recuperación de las genealogías de las mujeres ignacianas desde sus textos mas esenciales.No te lo puedes perder