jueves, 30 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.31 Enero


Comentario al Evangelio.31 Enero

Mc 4,26-34
                        La fecundidad de lo que no se ve


Vivimos en la cultura de la apariencia y de la postverdad. Lo que no sale en los medios de comunicación de masas no existe y la realidad se inventa o se deforma en base a su visibilidad mediática. Pero lo esencial empieza siempre de forma casi impercetible. Lo nuevo siempre nace pequeño y en vulnerabilidad. Tiene forma de semilla. De ella toma su simplicidad y también su potencia misteriosa, porque en la semilla ya está la flor.  El Evangelio es experto en semillas más que en grandes plantaciones. 

Por eso la Buena Noticia irrumpe y se revela con una fuerza misteriosa en el mundo de lo invisible, en las realidades que el sistema decide declarar sobrante, inútil, descartable. La Buena Noticia se dice en pequeños gestos que desde abajo y desde dentro tienen el poder de ir   trasformando la vida y el corazón humano.

Por eso el Evangelio nos desafía también a ser expertos y expertas en  procesos y a superar la mentalidad microondas que se nos impone. Pero  guarda también otro misterio: la de ser puro don, gratuidad y confianza. Porque aunque pide de nosotros y nosotras cuidado, trabajo, vigilancia, etc, su crecimiento no depende de nuestras fuerzas y esfuerzos, sino de un Amor mayor que nos supera y trasciende y que es el velador de toda vida, el cuidador invisible de toda la potencia misteriosa que ocultan las semillas.




Miradas para acompañar. Deustoforum


https://www.deusto.es/cs/Satellite/alumnisolidario/es/alumnisocial/formacion-/ciclo-miradas-para-acompanar

miércoles, 29 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.30 enero.


Comentario al Evangelio.30 enero (Mc 4,21-25)

Dimensión pública de la fe


La fe es un don y es nuestro referente de sentido. El Evangelio tiene capacidad de conmover, seducir y provocar cambios en nuestras vidas y en las vidas de otras personas y nos mueve a dar razón de nuestra esperanza. La comunicación del Evangelio no es tanto una cuestión de proselitismo como de contagio. Creer en la Buena Noticia del Evangelio es una experiencia personal que se arraiga en el seno de una comunidad y conlleva una dimensión pública.
Por eso la fe puede ser reducida a la sacristía, ni puede ser vivida ni testimoniada en escenarios estrictamente religiosos o privados, sino que allá donde se jueguen los intereses y anhelos más hondos de la humanidad será siempre un lugar privilegiado para el testimonio cristiano. El Evangelio tiene vocación de plaza pública.

Comentario al Evangelio.29 Enero

Comentario al Evangelio.29 Enero
Mc 4, 1-20
Parábola del sembrador

El lenguaje de Jesús no es dogmático ni abstracto. Remite siempre a la vida y por eso toma de la experiencia cotidiana imágenes, símbolos, metáforas que provocan y evocan con sencillez la profundidad del misterio de la vida y la presencia sostenedora de Dios en ella. Por eso el lenguaje de Jesús es el de las parábolas.

La parábola del sembrador nos recuerda que el corazón humano es tierra fértil porque la semilla del Amor lo habita en su hondura, sin embargo es necesaria la libertad y la responsabilidad humana para que dé fruto. Por eso, si la semilla es un don hacernos cargo de la tierra es tarea nuestra, lo cual exige atención y cuidado.

¿Por dónde sentimos hoy que nuestra tierra está descuidada y qué  es lo que más nos ayuda a tenerla a punto para que la semilla dé fruto abundante?.

lunes, 27 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.28 Enero

Comentario al Evangelio.28 Enero
(Mc 3, 31-35)

¿Quiénes son mi padre, mi madre y mis hermanos? 


La libertad de Jesús y la radicalidad de su mensaje afectan también a la concepción de la familia. Los vínculos de la sangre son poderosos, pero por encima de ellos está la universalidad de la fraternidad y la centralidad del Evangelio y su envío. La Buena Noticia va más allá de los intereses de la propia a familia o el clan. La escucha compartida y comprometida de la Palabra de Dios en la historia es partera de vínculos y relaciones nuevas que amplían el sentido de la fraternidad y la maternidad humana resinificándolas.

¿Quiénes soy para nosotros nuestra madre y nuestros hermanos y hermanas? ¿Cómo testificar hoy en nuestros ambientes con hechos y palabras la universalidad de los vínculos del amor cristiano, más allá de la raza, el género, la religión, la situación socioeconómica o el lugar donde se ha nacido? ¿A qué nos reta?

Comentario Evangelio 27 de Enero


https://pepatorresperezblog.blogspot.com/2020/01/comentario-al-evangelio-dia-27-enero.html

sábado, 25 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.26 Enero


Comentario al Evangelio.26 Enero (Mt 4,12-23)
Identificar hoy los signos del Reino

En el espesor de la realidad y sus noches se mantiene siempre una luz que señala que el amanecer está en camino. El Evangelio es nuestra luz. Señala siempre alternativas posibles cuando parece que no hay salida y nos sostiene en la búsqueda del bien común en activa espera. Jesús es la Buena Noticia de Dios que irrumpe en nuestro mundo quebrado y anhelante de liberación. Él es el Reino y las semillas del verbo habitan la entraña de la realidad y el corazón humano, aunque es necesario cavar hondo para descubrirlas. El Reino es el Amor hecho historia, gesto, inclusión, justicia, comunión y está ya entre nosotros, aunque convive con el desamor, la violencia, la injusticia. Por eso es importante perforar la realidad para identificar sus signos en nuestro mundo y ponernos de su parte, alentando con nuestra vida su crecimiento. Por eso es necesario convertirnos y volver a Jesús y su mesianismo entrañable que desde bajo y desde lo pequeño nos invita a revertir la historia a favor de los últimos y últimas. Hoy nos sigue llamando para ello como a los primeros discípulos.

viernes, 24 de enero de 2020

Comentarios al Evangelio. 24 Enero

                             Comentarios al Evangelio. 24 Enero

                                    (Marcos 3,13-19)

                         Estar con Jesús y anunciar su liberación


                                 
Como a los doce Jesús no sigue llamando hoy a estar con él y anunciar su liberación. Lo hace desde la originalidad de nuestras propias biografías, desde nuestros dones y también precariedades. Acoger esta llamada nos abre a posibilidades insospechadas de transformaciones internas y externas, aunque al principio nos parezcan imperceptibles. 

El seguimiento a Jesús es siempre un proceso inacabado sostenido en la confianza en Aquel que nos ha salido al encuentro y nos ha llamado por nuestro nombre. Pero Jesús nos llama y nos convoca en comunidad, en iglesia. Una comunidad que lo es para el servicio al mundo y no para protegerse de él y que tiene en su centro el Evangelio.

¿Qué centralidad ocupa el Evangelio en nuestras vidas y en las vidas de nuestras comunidades? ¿Cómo ayudarnos a encarnarlo en las situaciones concretas de nuestro cada día?

jueves, 23 de enero de 2020

Comentario al Evangelio. Día 23 Enero

                            Comentario Evangelio 23 de Enero
                                 
                                 (Marcos 3,7-12) 
                            
                        Jesús, la palabra de la vida


La capacidad de atraer y convocar que tiene Jesús no es por sus palabras o discursos, sino que, como dice el texto, la gente acude a su encuentro “al oír lo que hacía”. Es la palabra de la vida y el testimonio lo que hace creíble a Jesús y suscita en la gente deseos de estar con Él y participar de su Buena Noticia. Sus gestos y sus acciones provocan liberación y sanación entre quienes la vida les resulta una carga demasiado pesada y anhelan un mundo y unas relaciones alternativas. Por eso ser sus testigos nos compromete en ser agentes de ese otro mundo y otras relaciones posibles y hacerlo al modo de Jesús, desde su ternura y su cuidado amoroso.

miércoles, 22 de enero de 2020

Comentario Evangelio. 22 de Enero


Comentario Evangelio. 22 de Enero (Mc 3,1-6)
                    Culto cristiano y sacramento de la "projimidad" 
Este texto del Evangelio de Marcos delinea ya la trayectoria de la vida de Jesús desde su inicio y su compasión transgresora. Jesús es misericordia en acción, misericordia en relación por eso mira la realidad siempre desde la perspectiva de los últimos y últimas, por eso capta el sufrimiento del hombre de la mano paralizada, que la sinagoga había seguramente naturalizado.

Se acerca a él y le pide que se ubique en el centro donde todos lo vean, visibilizando su situación, señalando de este modo que el culto a Dios si es verdadero no puede nunca dar la espalda al sufrimiento de quienes son condenados a la exclusión.Por eso, pese al escándalo de quienes anteponen la ley a la misericordia y la dignidad de las personas, Jesús sana a este hombre haciéndole también consciente de su responsabilidad en ella, implicándole en su propia liberación, desinstalándole de su condición de víctima.

Jesús señala así, cual es el culto que Dios quiere y la projimidad como lugar de encuentro y adoración con el Misterio. Por eso su misericordia resulta amenazante para quienes en nombre de Dios legitiman la indiferencia y la pasividad ante el sufrimiento de los otros y otras en nombre de la seguridad de la ley y los preceptos.

lunes, 20 de enero de 2020

Comentario Evangelio. 21 Enero


Comentario Evangelio. 21 Enero (Mc 22,23-28)

El Evangelio, escuela de libertad 

La libertad de Jesús es radical porque alcanza hasta las mismas raíces de su ser. Jesús es pura disponibilidad y apertura al proyecto de Dios y esa es la única seguridad que sostiene su vida. Por eso el origen de su libertad es la confianza y el saberse en manos de su Abaa. Jesús denuncia las tradiciones y el culto religioso que anteponen la observancia a la justicia y a la misericordia.

 Por ello escandaliza a los fariseos de todos los tiempos, incluido al que podemos llevar en el propio corazón. El Evangelio es una escuela de libertad. Libertad de egos, de culpas, de miedos. Libertad también de seguridades que nos atan o de las expectativas de los demás sobre nosotros y nosotras mismas que nos dejan prisioneros en la imagen o el prestigio. 

Pero el Evangelio es también escuela de libertad frente a toda forma de poder e instrumentalización de lo humano al servicio de los intereses del status quo.

domingo, 19 de enero de 2020

Comentario del Evangelio.20 Enero

Comentario del Evangelio. 
20 Enero (Mc 2, 18-22)
                                      ¿Ayuno o fiesta? 



El Evangelio es la Buena Noticia de libertad y la alegría. Su novedad radical consiste en que el amor y no la ley son el camino de acceso a Dios y que por tanto donde hay amor allí está Dios. El cristianismo no es una religión de ayunos sino de projimidad y misericordia entrañable. Jesús rompe con una imagen del Dios de la retribución: “Te doy para que me dés” e inaugura otra: la desmesura y el derroche de amor de su Abaa por todas las criaturas, especialmente para las más desvalidas y vulneradas. Este salto cualitativo en el modo de entender a Dios lo es también en la comprensión del culto. 

El culto cristiano es banquete, celebración gozosa de la Buena noticia de Dios, que no se cansa de ofrecernos nuevas oportunidades de cambio y renovación profunda para humanizar la vida. Pero el Evangelio es siempre propuesta generosa, no se impone, sino que se expone a nuestra libertad y acogida. ¿Cómo captamos hoy la novedad retadora del Evangelio y a qué renovaciones profundas nos urge en nuestras vidas y en nuestros contextos?.

Comentario al Evangelio.19 Enero


Comentario al Evangelio.19 de Enero (Jn 1,29-34)


Un mesianismo entrañable 
El mesianismo de Jesús no es sacrificial como el de Juan Bautista sino un mesianismo entrañable. Jesús es la máxima recepción de la ternura y la compasión de Dios. Por eso su modo de afrontar la violencia, la injusticia, la experiencia del mal y el pecado pasa por la bondad del corazón y la oferta de la conversión y la reconciliación desde los últimos. 

Su mesianismo es también un mesianismo descalzo, desde la sencillez de vida la vulnerabilidad asumida y compartida y el espíritu de la no violencia, por eso Juan le reconoce como “el cordero de Dios que quita el pecado de mundo“. Por eso Jesús es también signo de contradicción y su misericordia “escandaliza” a quienes han encerrado a Dios en una moral preceptual, olvidando que su entraña no es otra que la del amor y la justicia.

viernes, 17 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.18 enero


Comentario al Evangelio.18 Enero (Mc 2,13-17)
Jesús y las periferias 

Las periferias sociales y existenciales son cita obligada para encontrarnos hoy con Cristo vivo. Jesús transita por ellas y comparte mesa y vida con los excluidos y excluidas. Esta práctica de la comensalidad abierta de Jesús es un escándalo para quienes se sienten expertos en Dios y presumen de tener vidas intachables.

El Dios que nos revela Jesús no es un contable de méritos, sino pura gratuidad y desmesura. Por eso allá donde hay debilidad humana, precariedad y herida hay lugar para la Buena Noticia del Evangelio y el encuentro se convierte en sacramento y signo de liberación. ¿Desde qué periferias sociales y existenciales, como a Leví, Jesús nos urge hoy en nuestros ambientes a vivir el sacramento del encuentro y a compartir la mesa de la vida en abundancia con los excluidos y excluidas?.








jueves, 16 de enero de 2020


Comentario al Evangelio.17 Enero. (Mc 2,1-12)

Resiliencia y compasión


Allá donde parece que no hay salida la esperanza que brota de la fe es siempre fuente de creatividad y resiliencia. Jesús queda conmovido por la de este paralítico y sus acompañantes y obra el milagro. Pero no todos lo entienden. La libertad y la compasión de Jesús son percibidas como amenazante para quienes viven atados a la ley y la anteponen a la dignidad de la persona,

El Dios de Jesús es todo misericordia y su lógica no es preceptual sino amorosa y entrañable con el sufrimiento humano. Desde esta clave entendemos los milagros de Jesús como signo del Reino. En ellos Jesús nunca suple la libertad humana, sino que cuenta con ella porque Dios no se impone al ser humano, sino que se expone a su libertad y acogida.

¿Cuáles son hoy nuestras parálisis y de qué camillas tenemos que levantarnos, con la fuerza de Jesús, para recuperar la libertad y la alegría del Evangelio?.





Comentarios al Evangelio.Día 16 Enero

Comentarios al Evangelio. 16 Enero (Mc 1,40-45)
Jesús sana y libera 


Los relatos de sanación del Evangelio de Marcos constituyen un itinerario compasivo en el que las manos ocupan un papel fundamental. Los verbos poner sobre, tocar, extender se repiten en ellos para significar la acción liberadora de Jesús al entrar en contacto con los cuerpos considerados malditos, impuros, “indignos de Dios” en Israel. Sus manos son fuente de conocimiento y reconocimiento. Jesús al tocar “empodera”.

En sus relaciones y trato humanizador con los más excluidos y excluidas de Israel les confirma como imagen y semejanza del Creador. Las manos de Jesús se abren en gesto de comunión y reconciliación y la impureza queda invalidada en su poder de contagio. El tacto de Jesús, les hace recuperar su identidad negada, hace de ellos criaturas nuevas.

Su modo de tocar la vida y relacionarse con las personas revela la compasión y la ternura de un Dios que invita no a cumplir preceptos sino a humanizar la vida desde los últimos y últimas. De esta experiencia brota el agradecimiento y el anuncio

miércoles, 15 de enero de 2020

Comentarios al Evangelio.15 de Enero


     
Comentarios al Evangelio.15 de Enero.

Mc 1,29-39

Misericordia en acción, misericordia en relación


Jesús rompe la separación entre lo sagrado y lo profano. Toda la realidad es ámbito de salvación y lugar de misión. Jesús sale de la sinagoga, se encuentra con la gente en la cotidianidad de su existencia, en sus casas, como le sucede a la suegra de Pedro. Comparte con ellos sus lugares de vida. La salvación no acontece en lo extraordinario, sino en escenarios vitales aparentemente “irrelevantes”. Es el clamor del sufrimiento humano y las ansias de liberación de quienes anhelan otra humanidad posible, otras relaciones, lo que desencadena que la misericordia de Jesús se convierta en misericordia en acción, misericordia en relación. Quien queda tocado por ella, como la suegra de Pedro se siente también movido a la diaconía del Reino, a ser testigo de su compasión entrañable.


martes, 14 de enero de 2020

Comentario Evangelio.14 de enero

Comentario Evangelio.14 de enero (Mc 1,21-28) 



Libertad y autoridad de Jesús 

Desde el inicio del Evangelio de Marcos Jesús mueve a posicionamiento. Sus obras y sus palabras no dejan indiferentes. Provocan admiración o desconcierto, sospecha o agradecimiento. Así sucede ante la curación que realiza en sábado en la sinagoga de Cafarnaum. Su autoridad y libertad para anteponer la compasión y la justicia a los preceptos de Israel, cuando lo que está en juego es el sufrimiento humano provoca interrogantes incómodos a su alrededor. 

Para Jesús la autoridad de Dios es inseparable de la autoridad de quienes sufren. Se siente movido a compasión por el Espíritu de su Abaa que le envía y sostiene en la tarea de aliviar sufrimiento y generar liberación.

lunes, 13 de enero de 2020

Comentario Evangelio.13 de Enero


Comentario Evangelios.13 Enero (Mc 1, 14-20


Dejar redes y soltar amarras 

Como aquellos primeros discípulos Jesús nos invita hoy en la cotidianidad de nuestra vida a ser sus compañeros y compañeras. Etimológicamente compañeros viene de “cum-panis”, es decir compartir el pan de la vida, su sueño, su proyecto de inclusión y fraternidad empezando por los últimos y últimas.

La cotidianidad es lugar de reconocimiento y encuentro. Jesús sabe mirarla en profundidad y por eso capta los deseos más hondos de aquellos pescadores que desde la sencillez de sus vidas nunca habían intuido otro horizonte. 

Como a ellos, si nos dejamos, el Evangelio nos abre a nuevas perspectivas de vida, nos transforma la sensibilidad y nos convierte en servidores y servidoras del Reino, Para para ello tenemos que dejar las redes y soltar amarras. 

¿Qué seguridades tenemos que soltar para recuperar la vitalidad y la alegría profunda de nuestro seguimiento a Jesús hoy?.

Pepa Torres Pèrez 

sábado, 11 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.Dìa 11 de Enero


Comentario al Evangelio. 
Día 11 de Enero (Lc 5, 12-16) 
Los milagros, signos del Reino

Los milagros de Jesús son un signo de la irrupción del Reino. No podemos entenderlos como acciones mágicas extraordinarias, sino más bien como obra del amor y del encuentro liberador de Jesús con las personas. 

Jesús queda afectado por el sufrimiento del prójimo, especialmente por los más excluidos y excluidas, como le sucedió con el leproso al que hace relación el Evangelio.Sus manos se convierten en sacramento de projimidad sobre aquel cuerpo maldito, sin miedo a quedar contagiado por su mal e impureza. Es este trato reconocedor, libre de todo temor y prejuicio lo que le devuelve la dignidad y la salud y le reintegra en la comunidad.

Pero Jesús no queda preso en las expectativas del pueblo sobre Él a partir de los signos que realiza, sino que todas sus palabras y hechos remiten a su Abba, todo compasivo, con el que necesita estar en permanente contacto. Jesús es contemplativo en la acción, contemplativo en la relación.

Pepa Torres Pèrez 

viernes, 10 de enero de 2020

Comentario al Evangelio. Día 10 Enero

Comentario al Evangelio. Día 10 Enero (Lc 4, 14-22 a) 

“Esta palabra se cumple hoy“ 

Jesús es la Palabra plena de Dios y la confirmación de sus promesas hecha carne historia, pueblo, pobre. El sentido de su existencia es hacer histórico el sueño de Dios: la liberación de los oprimidos y que la vida sea una buena Noticia para todos empezando por los últimos y no una pesadilla. 

Esa es la misión de Jesús y esa es la misión de la iglesia. Al igual que sus contemporáneos aquella mañana en la sinagoga de Nazaret necesitamos fijar los ojos en Jesús y dejarnos sorprender por su misericordia entrañable y liberadora, para ponernos con Él,en la tarea de humanizar la vida y ser cauce de la solidaridad amorosa de Dios en nuestros contextos.

¿Cómo actualizar hoy esta misión desde nuestras comunidades cristianas en un mundo que sigue clamando por su liberación?.

jueves, 9 de enero de 2020

Comentario al Evangelio, 9 de Enero

Comentario al Evangelio, Día 9 de Enero (Mc 6,45-52)

No temáis 

En el oleaje de la vida no estamos solos ni solas. Como a los discípulos, Jesús se nos hace presente caminando sobre las aguas, recordándonos que aunque corran vientos contrarios Él es el Señor de la vida y llegaremos a buen puerto, porque su fidelidad y amor son inquebrantables.

Desde el corazón mismo de las dificultades emerge una esperanza que es más fuerte que el miedo, aunque conviva con el desconcierto. Es la esperanza de la fe, porque creer es confiar y reconocer la voz del Viviente diciéndonos: Ánimo, soy yo no temáis. 

En el espesor de los acontecimientos de nuestra vida ¿cómo y a través de quienes escuchamos hoy estas palabras de Jesús?.¿Qué puede más en nosotras la fe o la desconfianza, la desesperación y el miedo?.

Pepa Torres Pèrez 

martes, 7 de enero de 2020

Comentario al Evangelio.8 de Enero


Comentario al Evangelio. 
Día 8 de Enero (Mc 6,34-44)

La lógica de lo común 


La economía del Evangelio no es la lógica del cálculo ni la del atesorar, sino la lógica del don y el milagro del compartir bienes y recursos. Ante el hambre de la gente el texto refleja dos tipos de miradas o enfoques. La mirada de los discípulos y la mirada de Jesús.

La mirada de los discípulos es una mirada carencial, que les incapacita para ver los recursos que tienen las personas de cara al abordaje de su situación. Su lógica es capitalista, en tanto que no se les ocurre otra alternativa que no sea la del dinero para resolver la situación. Sin embargo la mirada de Jesús es una mirada que descubre potencialidades y no sólo carencias en las personas afectadas y por tanto detecta que en ellos mismos puede estar la alternativa a su situación.

En este texto se revela la economía del reino como la lógica de lo común. En el compartir de dones, bienes y servicios acontece el milagro que hace posible que haya vida en abundancia para todos y todas y aun sobre.








lunes, 6 de enero de 2020

Comentario al Evangelio 7 de Enero


Comentario al Evangelio 7 de Enero 


Mto 4,12-17. 23-25

El profetismo entrañable de Jesús 

La vida es mucho más que una coyuntura pero las coyunturas son importantes en ella. Nos ayudan a tomar decisiones. La detención de Juan urgió a Jesús a su vida pública. Pero su profetismo no es sacrificial sino entrañable. De la sinagoga a las fronteras y periferias de Israel Jesús queda afectado por el sufrimiento del pueblo y anuncia la Buena Nueva del Reino sanando y liberando a quienes no pueden más, devolviendoles la esperanza y la dignidad arrebatada. 

Jesús es la misericordia de Dios en acción, la misericordia de Dios en relación. En sus gestos de ternura y reconciliación el Reino se actualiza y urge a nuestra conversión y seguimiento comunitario, como aquellos primeros discípulos que dejándolo todo le siguieron.

Pepa Torres Pérez  

Comentario al Evangelio dìa 6 de Enero. Epifanìa

Comentario al Evangelio dìa 6 de Enero. Epifanìa 
(Mateo 2,1-12) 
Reconocer la estrella 


La universalidad del Evangelio nos saca de nuestras comodidad e instalación y como a los Magos nos urge a salir hacia las periferias para encontramos con la encarnación de Dios. Lo que para unos es causa de profunda alegría para otros resulta amenazante por miedo a perder sus privilegios. El mesianismo pobre y vulnerable de Jesús es signo de contradicción desde el principio de su vida hasta el fin.

Por eso, como los Magos necesitamos estar atentos y atentas y reconocer las señales de su manifestación entre nosotros. ¿Qué estrellas orientan hoy nuestro camino como comunidades cristianas en la salida hacia las periferias para encontrarnos con el misterio del Reino que se hace niño y vulnerable?. ¿Qué queremos y podemos ofrecerle?.
                                                 
                                                                      Pepa Torres Pèrez 

sábado, 4 de enero de 2020

Comentario al Evangelio del domingo 5 de Enero

Comentario al Evangelio del domingo 5 de Enero (Jn 1, 1-18) 

En el principio existía La Palabra 


Dios es palabra creadora y amorosa. No es Palabra vacía separada de la acción. En Él no hay dualismo. Dios al hablar “hace” y nos invita a hacer con Él. En Él no hay separación, sino inclusión e integralidad. La Palabra de Dios es una palabra que obra, y que nos invita también a nosotros y a nosotras a que nuestro decir, sea un hacer. 

Por eso es Palabra encarnada que en Jesús se nos revela en plenitud. Es ofrecimiento y nunca imposición ni violencia. Por eso abrirnos a ella exige nuestra libertad. Podemos acogerla o cerrarle las puertas de nuestra sensibilidad y nuestro corazón: vino a los suyos y los suyos no lo recibieron, pero para quienes la reciben es fuente de libertad, creatividad amorosa y solidaridad. 

Comentario al Evangelio día 4 de Enero



Comentario al Evangelio día 4 de enero (Jn 1,35-42)

¿Maestro, dónde vives? 



Esta pregunta sigue viva en nuestros ambientes hoy aunque no se exprese en lenguajes religiosos. El anhelo de sentido y de plenitud de nuestro mundo se expresa en códigos culturales que necesitamos interpretar. Más allá de las crisis de los sistemas religiosos el corazón humano está sediento de una experiencia honda que le colme y le dé fundamento. 

El Evangelio tiene capacidad para conmovernos y transformar radicalmente nuestras vidas si nos abrimos a su novedad desinstaladora. Hay encuentros que nos modifican, que marcan un antes y un después en nuestra existencia, como le sucedió a los primeros discípulos. 

Hay diálogos que contagian y animan a la esperanza y la utopía del Reino. ¿Cómo cultivamos en nuestras comunidades cristianas el sacramento del encuentro y estamos atentos a los deseos que despierta?.
                                                          Pepa Torres Pèrez 

viernes, 3 de enero de 2020

Comentario al Evangelio del dia 3 de Enero


 Comentario al Evangelio del 3 de Enero  (Jn 1,29-343)  

La fuerza del testimonio



El testimonio interpreta los signos y hace creíble la fe. El testimonio de Juan Bautista como el de tantos hombres y mujeres testigos en la historia de la iglesia nos mueve a la autenticidad en el seguimiento de Jesús y a dar razón de nuestra esperanza. Pero el testimonio para ser veraz requiere la hondura y la gratuidad de la experiencia.

 Las palabras se tornan huecas si antes no han sido pasadas por el corazón. Por eso el cultivo de la interioridad y la personalización son condiciones imprescindibles para un testimonio profético. La Buena Noticia del Evangelio más que apalabrar se encuerpa y dar testimonio de ella, más que un imperativo ético, es un don del Espíritu que nace del agradecimiento y la alegría, aunque conlleve costes. Por eso el hombre y la mujer testigo lo son desde una experiencia de radical humildad y confianza en un Amor mayor que les sostiene y sobrepasa. 


                                                                       Pepa Torres Pèrez

jueves, 2 de enero de 2020

Comentario Evangelio 2 de Enero 2020


  Suscitar condiciones de posibilidad (Jn 1, 19-28)


El grito de Juan Bautista en el desierto: Preparad el camino al Señor es una provocación que nos saca de nuestra zona de confort y nos lleva a preguntarnos cuáles son hoy los desiertos donde se hace necesario suscitar condiciones de posibilidad para que la Palabra encarnada de Dios sea reconocida y acogida. 

¿Cómo identificar las necesidades de salvación de las personas que nos rodean en el corazón de nuestros ambientes secularizados y en los que los lenguajes y símbolos religiosos han dejado de significar, pero no por ello exentos de búsqueda de sentido y de anhelo por otro mundo posible?. ¿Qué nuevos lenguajes gestos, signos, somos urgidas a poner en práctica?. 

Suscitar condiciones de posibilidad para el acceso a la fe requiere también no cansarnos de echarle creatividad y paciencia en el arte de acompañar procesos, porque la fe más que doctrina es experiencia, y en identificar en lo más hondo de los clamores de la humanidad el clamor de Dios mismo en su encarnación. 

miércoles, 1 de enero de 2020

Abrirnos al asombro y la liberación de Dios (Lc 2,16-21)


Comentarios al Evangelio del día de Año Nuevo  (Lc 2,16-21)

La capacidad de asombro de los pastores puede ser una buena disposición para iniciar el nuevo año. Lo contrario al asombro es la rutina. El ya me lo sé o el siempre ha sido así, que nos hace inmunes al milagro cotidiano de la vida y sus señales. Necesitamos seguir aprendiendo cada día a mirar con hondura la realidad en sus gestos más pequeños e insignificantes y poner especial atención en lo que el poder y su lógica invisibiliza o desprecia. Quizás solo así captemos el misterio de Amor que la habita. 

El Dios de Jesús no es el Dios que lo tiene todo preparado, atado y bien atado, no es el Dios de la inercia o la rutina, sino el Dios que lo hace todo nuevo y por eso nos urge a la renovación permanente y nunca a la instalación (Ap 21, 4). Es el Dios que por no “atar” las cosas ni cerrarlas no cierra ni la creación, por eso nos invita a ser co-creadores y co-creadoras con Él en una creación continua a través del trabajo y la acción humana. Es el Dios de la sorpresa y la libertad y la libertad humana conduce a situaciones imprevisibles. ¿Cómo descubrimos y experimentamos esta novedad, en nuestra vida, en nuestros contextos, en la historia?. ¿Qué quiere hacer Dios de nuevo en nosotras y con nosotras, en nuestros ambientes este año que empieza? 

El Dios encarnado, vulnerable, hecho niño, acostado en un pesebre, que se nos revela en Jesús de Nazaret nos urge a no cansarnos de seguir posando nuestra mirada y sensibilidad no en los primeros planos de la historia, ni en los personajes principales, sino en los secundarios y en su revés. La salvación, la liberación que anhelamos acontece en lo cotidiano y desde los últimos y últimas. Requiere también abrirnos a la pedagogía de los procesos y lo seminal, porque como nos recuerda el papa Francisco: “De las semillas de esperanza sembradas en las periferias olvidadas del planeta, de esos brotes de ternura que lucha por subsistir en la oscuridad de la exclusión, crecerán árboles grandes, surgirán bosques tupidos de esperanza para oxigenar el mundo“ (Discurso del papa Francisco en el II Encuentro con los movimientos populares, Bolivia, 2015) 

Jesús, el hijo de María, nacido de mujer (Gal 4,4) toma de ella su carne y se hace buena noticia de liberación también para nosotras las mujeres. Por eso el espíritu de Evangelio nos urge a no acostumbrados ni naturalizar la violencia de género ni la feminización de la pobreza y a no cansarnos en la lucha por una sociedad y una iglesia donde ninguna mujer sea excluida, hasta que la dignidad sea costumbre, porque ya nadie puede ser esclava, sino que por voluntad del Amor somos herederas de la liberación de Dios (Gal 4,6-7) 

Como María de Nazaret guardemos también nuestras perplejidades en el corazón-

Pepa Torres Pèrez