No hay espiritualidad sin justicia con las mujeres,
especialmente con aquellas cuyos derechos son más vulnerados.
Nos lo recuerda
el Observatorio Jeanette Beltràn,
Derechos en empleo de hogar y cuidados
Una red de mujeres que nos sentimos convocadas por la vivencia de la espiritualidad ignaciana pensada y vivida con perspectiva de género y a la luz de nuevos paradigmas teológicos.