miércoles, 23 de agosto de 2023

EXPERIENCIAS CIRCULO DE ESPIRITUALIDAD YADA 23 ( Berriz): Laura Gregorio González

 Mi experiencia en Yadá 2023: Laura  Gregorio González 

 

Me hablaron en la Revuelta de mujeres de esta semana de retiro espiritual de mujeres, sin explicarme demasiado, la verdad. Conociendo a quienes me lo recomendaban, sabía que no podría defraudarme, y me apunté, sin saber siquiera qué significaba eso de “Yadá”. Mis hijos me “reñían” diciéndome que cómo me apuntaba a algo que sin saber exactamente qué era, y bromeaban diciéndome que a ver si acababa en el retiro de una secta.

La verdad es que la experiencia no ha podido ser mejor: vuelvo renovada a casa, y con ganas de repetir el año que viene, si puede ser.

Han sido días intensos de aprender, reflexionar y orar, de compartir con otras 21 mujeres la fe, la vida, las heridas de cada una y la forma de cicatrizarlas. Días de aprender nuevos modos de orar, de descubrir qué es acuerpar lo vivido, pasando por nuestro cuerpo las experiencias, oraciones y reflexiones de cada día. Y días para concluir, en fin, que toda nuestra fe tiene al final que ponerse a trabajar por los demás para que tenga sentido.

Hemos disfrutado de unas ponentes excepcionales, que tanto a nivel de conocimientos, como a nivel vivencial, nos han trasmitido muchas inquietudes, mucha vida, dándonos pistas para pensar, orar y para que ahora, a la vuelta a casa, podamos actuar. Y, además, descubriéndonos genealogías de mujeres (poco conocidas para la mayoría de nosotras) que nos ayudan a vivir la fe y trasladarla a la vida, al compromiso con los más necesitados, al “amor hasta el extremo”. Mujeres luchadoras, a veces borradas o poco destacadas en la historia de la Iglesia, poco conocidas a pesar de su grandeza, como tantas … ¡¡Ay, qué necesaria es la Revuelta de mujeres en la Iglesia!!

Además de todo eso, estos días he conocido a muchas mujeres de toda España con las que tejer redes, círculos de sororidad y apoyo, de las que he aprendido lo indecible, con las que me he reído muchísimo, y con las que he disfrutado cada rato.

Días aprovechados al máximo en un lugar privilegiado, en el Convento de las Misioneras Mercedarias de Bérriz (ojo con la Madre Margarita López de Maturana, y todo lo que aprendimos sobre ella en el Museo que hay en el propio Convento, otra mujer luchadora), que es un sitio precioso, en mitad de los campos de Vizcaya.

Decir que ha sido una gran experiencia se me queda corto. Ha sido una vivencia que me ha removido y conmovido, una oportunidad y un privilegio, que creo que he aprovechado bien, aunque la aplicación práctica de lo vivido se tiene que empezar a demostrar ahora, al volver a casa y durante este curso que empezaremos en breve.

Gracias a la Red Miriam por organizarlo, a las horas de trabajo que se han invertido para su preparación, y a lo vivido con todas las que habéis participado y compartido lo que sois, porque os llevo a todas en el corazón, de verdad.


Laura De Gregorio González