lunes, 2 de noviembre de 2020

Comentario al Evangelio:2 de Noviembre

En las manos de Dios en y la fidelidad de quienes nos han precedido  ( Jn 14,1-6)

En el día de los Difuntos recordamos a los seres queridos que ya no están físicamente entre nosotros y nosotras, pero cuyas vidas siguen unidas a las nuestras, fortaleciéndonos y acompañándonos. Como las mujeres que acudieron con perfúmenes al sepulcro de Jesús y descubrieron que Él ya no estaba allí, también nosotras y nosotros experimentamos su presencia viva en nuestro corazón y en lo profundo de la historia. Nuestros difuntos y difuntas nos ayudan a sentirnos parte de esta larga cadena humana de amor, de lucha por la vida, de dones y saberes compartido, de gratuidades y resistencias por las que hoy somos quienes somos y podemos reconocer agradecidos y agradecidas que la humanidad no está perdida, sino que esta sostenida en las manos de Dios y en el esfuerzo y la fidelidad de quienes nos han precedido.