Este texto plantea la radicalidad del seguimiento a Jesús y las propias contradicciones con su grupo, que no terminan de entender la ruptura que supone con el mesianismo triunfalista que ellos esperaban. Frente al deseo de poder e influencia que representa en este texto la madre de los Zebedeos Jesús cuestiona radicalmente el poder-dominación y plantea la alternativa del Evangelio, como Buena Noticia para los sin poder. El poder es fuente de dominación y exclusión, fuente de enfrentamiento y división y hace que unas vidas valgan más que otras. Frente a su lógica excluyente Jesús propone un orden nuevo: el del servicio desde abajo, para que no haya nunca más últimos. La tentación del poder es siempre una amenaza en nuestra vida y en la vida de la Iglesia que a menudo tendemos a disfrazar bajo capa de bien y que requiere mucho descernimiento. ¿Por dónde somos tentados y tentadas hoy para vivir desde la lógica del poder y no desde el espíritu de servicio al que la práctica contracultural de Jesús nos urge?.
